🩷¡Que lindo verte por acá!🩷

La danza del duelo: entre caos y renacer

La última Luna llena sentí como un rayo que caía sobre mí.

Lo paradójico fue que, en lugar de reducirme a cenizas, me despertaba llena de vida.

Es extraño encontrarse danzando en el caos... hacía años que no experimentaba esa sensación.


Entendí que algunas cosas deben realmente culminar, que hay que dejar de sostener lo insostenible y animarse a mutar.

Lo digo mientras me miro el flequillo nuevo: a veces soy literal, y las etapas también las transmuto con un corte de pelo.


Me cayó una ficha al ver que La Dalia cerraba el espacio físico de Tienda Fe, una de las primeras tiendas esotéricas en Buenos Aires, en Av. Santa Fe.

Hace 13 años ella y su socia armaron una movida teñida de magia, sahumos y tarot de Marsella versión Jodorowsky.


No voy a cuestionar sus métodos hoy; admito que siempre admiré cómo gestionó su negocio y cómo navegó las mareas de la economía argentina. Pero hoy, lejos estamos de algo estable.

Hasta el dólar flota, y es entendible que la magia no conviva fácilmente con tanta terrenalidad.


No sé cómo estará viviendo ella este proceso por dentro, no la conozco, pero puedo empatizar con el desapego y, sobre todo, con el duelo.

Hoy quería que hablemos un poco de eso.


El duelo es la respuesta psicológica y emocional que surge ante una pérdida, y creo que hoy existen muchos más duelos de los que solemos nombrar.

Que sean invisibles o poco normalizados es lo que los hace aún más dolorosos.


A nivel colectivo, sabemos que el duelo es sinónimo de complejidad, y no podría ser de otro modo, porque como seres humanos tenemos miles de respuestas posibles: ritmos diferentes, intensidades diversas.


Lo que duele realmente es acostumbrarse a estar sin aquello que se perdió. Es adaptarse a habitar la ausencia.


Hay personas que hoy duelan el fallecimiento de un ser querido, otras la ruptura de una pareja, un distanciamiento familiar, un despido o un cambio de carrera. También duelan la pérdida de la imagen corporal, cerrar una tienda o, como en mi caso, reorientar un emprendimiento. Una mirada profesional.


Siempre me gustó escribir y desde hace unos meses estudio comunicación y marketing digital, que me están ayudando a ver mi camino con más claridad.


Quería compartir un poco de mi proceso, porque siento que atravesar estos duelos también implica preguntarse qué dejamos atrás y cómo nos reinventamos.


No pretendo tener la solución al duelo ni ofrecer recetas mágicas. Lo que sí creo es que el duelo es una respuesta natural, casi inevitable, ante los procesos de la vida que nos obligan a soltar, cambiar o despedirnos.


Cada duelo es único y merece respeto, tiempo y espacio para ser vivido. No es un “problema” que debamos arreglar rápido, sino un proceso humano que nos invita a aprender a habitar la ausencia y a redescubrirnos.


Si estas reflexiones te resonaron y sentís que necesitás un espacio para explorar tus propios procesos de duelo y transformación, te invito a agendar una sesión conmigo. A veces, tener una mirada externa y un espacio contenido puede hacer la diferencia en estos tránsitos.


Cada Lunes comparto nuevas reflexiones sobre crecimiento personal, espiritualidad y los procesos que nos van transformando. También brindo mi mirada sobre cultura, política, salud mental, entre otras cosas que me interesan.

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Y por favor, contame: ¿qué duelos invisibles estás transitando? ¿Cómo te estás cuidando en este momento?

Me encantaría leer tu experiencia. Podés escribirme por DM en IG.


¡Nos leemos pronto!

Jennifer | @unahijadevenus

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